31/7/08

La tienda

Querida Lakshmi,
Que muchos momentos lindos pasamos en la ENA. Y que muchas conversasiones importantes tuvimos... Hoy me recuerdo especialmente de como tu y yo ibamos a la tienda de dolares. Contigo vi por primera vez la tarjeta de credito. No sabia que rayos era eso, tu me lo explicaste, y al final me caiamas mal lo mucho que se demoraba el pagar con ella. Te acuerdas? Tenian que tomar monton de datos y toda la cosa... Me acuerdo que ibamos siempre a una misma tienda. Pasabamos por cubanacán, entrabamos por el palacios de las convenciones, y cruzabamos un barrio de casas bien lindas, con jardines. Se decia que una de ellas pertenencia a Silvio Rodrigues. Bajabamos, cruzabamos quinta, avenida y ya. Para entrar a esa tienda habia siempre unas colas locas. Esperabamos una, dos horas, (perdiamos clases y todo), y al final, cuando entrabamos, no habia tanta cosa. Creo que nosotras siempre comprabamos galletas, aceite, ,pasta, huevos, sal aromatizada, que mas, que mas... azucar, cacao, jabones, desodorante, shampu y una que otra crema para la piel. Hoy me pregunto como era posible vivir con apensa eso, y se la respuesta. Por mi parte traia yo outras cosas de mi pais. Y mis padres me mandaban paquetes cada vez que alguien iba a La Habana. Por el tro lado, yo siempre he sido muy ahorradora, asi que no me costaba tanto. Pero te acuerdas, preferiamos llegar a la Ena alrededor de las 14h, cuando todo el mundo estaba en clases... A mi me daba pena llegar con jabas de comida, cuando el resto de la escuela no tenia que comida, sobretodo mis amigas... Lo bueno es que despues de un tiempo yo ya compartia con ellas lo poco que tenia. La Ena me dolia, pero yo era muy niña, no sabia de tantas cosas...

2 comentarios:

Nyabetse, Tatinguwaku dijo...

Lakshmi me ha contestado. Y me recordo que la tienda se llamaba Nautico! Y me proemtió que vendrá a dejarme unos tostones en cuanto pueda. Que bueno!

Lakshmi dijo...

Querida Amélia, son tantos los recuerdos contigo que no sé ni por dónde empezar.Parece que pasamos momentos difíciles por el período especial, pero yo sólo recuerdo que fuí muy feliz, que conocí gente amorosa y maravillosa como tú,que tuve excelentes maestros y compañeros de guitarra y que estuve locamente enamorada del hombre de mi vida. Y tú siempre estuviste a mi lado, hasta en las noches me decías que te despertara para acompañarme a ir al baño porque a mí me daban miedo los sapos que a veces andaban en el enorme baño sin luz,qué locura! Y aquéllas noches que nos íbamos con Edel a casa de Aland en la 5a. avenida, justo arriba de aquél restaurante elegante, La Maison, con un hambre del diablo y nos conformábamos con el aroma. Claro que cuando conocimos a la cafesóngoro quedamos impactadas con sus predicciones, aunque el hombre con el que me dijo que me iba a casar no resultó el que yo pensaba.
Recuerdo un día en el que María estaba muy triste, llore y llore, y tú y yo, enmedio de un apagón, empezamos a decir locuras de hacerle vudú a la persona que la estaba haciendo llorar y al final acabó muerta de risa al igual que nosotras.
Recuerdo cuando tu amiga A se ponía a "cantar" y no comprendíamos cómo alguien que estudiara dirección coral podía ser tan desafinada.
Y cuando le dijimos que Rubén Blades era un jugador de béisbol y se lo creyó, creo que nunca me lo perdonó.
También un fin de semana que estabas triste te llevé a casa de Pepe Ángel y recuerdo que tocaste en su piano de cola y te animaste.
Además del Náutico también fuimos a 5a. y 42, al mercadito al lado de la embajada rusa, al Tritón, al Neptuno, al reparto Flores,etc.,etc.
Te recuerdo en mi graduación en el Museo Napoleónico y el último día que estuve en Cuba, que llegaste a casa de Martín justo cuando salíamos al aeropuerto con Tulio y Campu.María se acababa de ir, como si se hubieran puesto de acuerdo para relevarse.Lo que no te dije es que ese día estaba tan triste por mi partida que durante las 3 horas que duró el vuelo a la ciudad de México no dejé de llorar ni un instante, era tanto y tan profundo lo que dejaba atrás que mi corazón no lo soportaba.
Creo que es suficiente por hoy, otro día vendré con mucho gusto a seguir dándole vuelo a la nostalgia.
Gracias por todo lo que me haz dado y compartido desde 1990.
Te mando todo mi cariño y mis mejores deseos para tí, la nena y BA.